Ya se atisba luz al final del túnel,
lo estamos consiguiendo. Hoy es día 22 de Abril y tanto Julio como Miguel
tuvieron actuación ayer con sus respectivas orquestas, pero eso no frena
nuestras inminentes ganas de acabar lo que tanto tiempo llevamos soñando.
Hemos quedado a las 4.30 para
recoger a Sara, nuestra corista… para variar llega un poco tarde y además
viene acompañada de dos amigas para que le hagan la tarde más entretenida… sabe
muy bien que va a ser pesada de digerir...
Son las 5 y diez de la tarde y
giramos la última esquina hacia el estudio. A lo lejos se ve el coche de Julio.
Nos están esperando Miguel, nuestro trompeta, y
él preparados para hacer su trabajo como sólo ellos saben. Tanto el primero,
que oculta sus cansados ojos tras sus oscuras gafas y el trompeta, que está
como si nada hubiera ocurrido el día anterior, nos sonríen al
llegar.
Yo más eufórico de lo normal
puesto que hoy voy de mirón, les ayudo a montarse su set a los metales puesto
que serán ellos quienes empiecen.
Miguel prepara el equipo, abre el
proyecto y todo listo para que tras unas pequeñas pruebas de sonido, dé comienzo
la magia. La canción que eligen para empezar es Funk It, exitazo que
presentamos por casualidad en nuestro último concierto, la que les ayudará a
ponerse a tono.
Y vaya si así es, empiezan con
muy buen pie y todo va viento en popa. Lo que ocurre es que Miguel, nuestro
trompeta, está ya bastante curtido y se preocupa muchísimo de que el sonido
vaya empastado hasta unos límites que tocan lo inaudible, pero con tal de
quedarse satisfechos con su trabajo cualquier esfuerzo es poco.
Van avanzando los temas poco a
poco, y se van sucediendo solos de uno y solos del otro en algo que parece una
competición, pero os puedo asegurar que estas batallas son de lo más
constructivas y se ayudan como buenos amigos que son a que las líneas del otro
no se vayan de madre y escoger con cuidado y decisión cada una de las notas.
Cuando tienen que tocar los dos juntos suena como un maldito batallón preparado
para atacar…
“¡¡¡JESÚS!!!” grita Julio desde
dentro. Se acabó. Entro rápido como una liebre y me dispongo a escuchar
semejante maravilla… no me lo puedo creer… ¡SOLO FALTAN LOS COROS!
Dentro de la salita de grabación
se nota el ambiente cargado de inspiración y del buen rollo que queda latente
entre nosotros… así da gusto trabajar.
Con Sara acomodada y yo un poco
más tranquilo empezamos con el último de los instrumentos a grabar, la preciosa
voz de nuestra corista. El problema es que al ser 6 temas los que han grabado
hoy los metales enteros, la tarde se ha consumido casi por completo y nuestro
productor, padrino del grupo, técnico de sonido y un largo etcétera, está ya un
tanto espeso y reconocemos que nos iremos sin mucha dilación.
Aun con eso, Sara consigue dejar
acabadas sus voces en dos canciones. La primera vez que entra su voz se nos
erizan los pelos a todos, a Julio le está dando algo, me dice: “Macho, es que
tiene una voz guapísima… en plan… Christina Aguilera ¿Sabes?”. A mí ya no me
quedan palabras. No sabría describir como me siento… creo que la palabra que
más se asemejaría a mi estado anímico sería “vacío”, me siento como si se me
hubiese exprimido por completo el limón que tanto esfuerzo me había costado
componer pero… habrá limonada para todos ya veréis ya…
22.35, nos vamos al fin, faltan 4
canciones todavía, pero mañana, día de San Jorge, volveremos y le daremos fin.
Día 8: Coros 2ª parte… DISCO CONCLUIDO.
Hoy estoy agotado, no he podido
dejar de pensar en el disco… solo espero que la gente pueda disfrutar al
escucharlo lo que yo lo he hecho mientras lo componía y lo que todos los
miembros del grupo sentimos al tocarlas…
Hoy se acaba… de camino al
estudio, hoy no hablamos mucho, Miguel sabe que estoy asustado por la
repercusión que tendrá esto a largo plazo. Sus palabras siempre saben hacer que
nos sintamos bien y nos dan fuerzas para seguir adelante… “Va a sonar genial,
se va a enterar la gente de lo que valemos Jesús, tú ya verás…”.
Hoy realmente no nos cuesta casi
nada acabar con los coros ya que Sara se los trae tan estudiadísimos de casa y con su dilatada experiencia no
es necesario repetir casi absolutamente nada. Son las 7.56 de la tarde Sara entona su última nota y...
S E A C A B Ó…
Sí… hoy si… al fin… lo hemos
hecho… y el trabajo de todos ha merecido la pena. Faltando todo el trabajo
restante de mezcla, post-producción y master, los temas suenan enteros y
contundentes… no queda nada más que se le pueda hacer a ninguna canción… sí sí…
se acabó… no me lo puedo creer. Han sido 3 meses de grabación y producción que hoy damos fin.
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Se cierra la primera etapa del
grupo… el tiempo de no saber hacia dónde ir, el no poder disponer de nada bien
grabado… se acabó, a partir de ahora, esperemos que todo sea más fácil….
Me voy a dormir que estoy
baldado… ha sido una presión enorme y
tanto y tanto esfuerzo que necesito dormir muchas horas para poder empezar a
hacerme a la idea de que de aquí a dentro de poquísimos días, tendremos en
nuestras manos el fruto de 1 año y medio de duro trabajo… Chicos… os lo
merecéis todo… Miguel, Julio, Juan, Pau, Luismi, Leo, Sara… sois brutales, os
quiero más que a nada en este p*** universo.
Y me faltas tú… Miguel Ordoñez…
persona que te has encargado de materializar las ideas en canciones, la
adrenalina en potencia y todas las cosas malas en buenas ideas para el progreso
de la canción… en nombre cada una de las personas que estamos involucrados en
el proyecto, te agradecemos desde lo más profundo de nuestros corazones todo el
tiempo y el trabajo que has invertido en nosotros sin pedirnos absolutamente
nada a cambio… como voy a poder quejarme si me rodeo de la mejor gente
existente en esta ciudad… Gracias chicos… hoy se ha cumplido el más grande de
nuestros sueños, pero no os preocupéis, ¡¡mañana ya tendremos otra meta!!
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